martes, agosto 20, 2013

Luna compañera



Luna hermosa ¿Por qué hoy no me ciegas?
¿Por qué hoy no te marchas con tu ahijada pendenciera,
que ha renunciado a mi vereda y pisa otra tierra?

Luna coqueta y andariega,
¿Por qué hoy no dejas a este lunático afligido,
dar un brinco de suicidio al océano celestial,
pa` terminar muriendo en tu costado?

Se que no te pido demasiado,
solo un poco de sosiego,
un está bien o un hasta luego,
una trémula voz que consuele a Soledad…

Pa`que deje tanta joda,
pa`que ya se decida a dejarme por completo,
pero no entre hoy mañana y luego, volver a cortejar,
que ya su luz no quiero que ya de su voz reniego.

Oye lunita consentida colgada de destellos, dame hoy oscuridad,
mengua pronto que no puedo entre tanta claridad
soportar este hasta luego, este que celebra soledad.

Luna apasionada y compinche, que en antaño ayudaste a conquistar
tanta sonrisa enternecida y tanta cama distendida,
hoy dame esta partida…

Pero como te la pido,
en un silencio más que atrevido y en una absoluta oscuridad,
sin testigos, sin el más mínimo vestigio, sin cuitas y sin más.

Luna juguetona, risueña y alcahueta
si halas la marea, hala igual esta maleva sensación
que hoy me aprieta el corazón y me aleja de vos.

Pero que más te pido mi Luna amada,
que hoy hagas ciego mi mirar a lo que antes te pedí iluminar,
solo me queda compañera no mirar atrás.

Hasta luego mi coqueta preferida, salgo a verte caminar,
entre nubes y estrellitas, promesas y quien sabe que más
esperando que estos duendes y musas que hoy me ayudaron a escribir,
se dejen de tanto parloteo y participen de este singular partir…

El que hoy te he pedido a ti...

Henry